lunes, 28 de diciembre de 2015

Los orígenes- Maria Bayona

Hola a todos lecturetas! Hoy no traigo reseña ni reto, vengo a hablaros del concurso de "Tomémoslo con sentido navideño" iniciativa que promovimos Laura de "La dejadora de libros" y Marie de "Deseo Literario", desgraciadamente no podemos llevarla a cabo puesto que no llegamos al mínimo de participantes, así que hemos decidido publicar cada semana uno de los relatos de los que nos enviaron (gracias a todas las personitas que participaron) hablaremos un poco de ellos y les acompañara una imagen a modo de portada.

El primero de ellos se trata de "Los Orígenes" un relato de Maria Bayona es una historia de 606 palabras en la cuenta lo que le ocurre a un joven en su infancia. La verdad este es uno de mis favoritos espero que os guste!


<< Dicen que mis días suelen ser normales pero, queridos amigos, mi vida nunca ha sido normal. De hecho, siempre he pensado que mi vida es digna de escribir un libro. Pero nadie pensaría jamás que una historia como la mía puede ser real. 
Todo comenzó el día de mi décimo cumpleaños. El día en que me revelarían el secreto de mi pueblo. Como bien era tradición allí, se contaba cuando el niño o la niña cumplía diez años. A partir de entonces, su vida cambiaba para siempre. 
Solo sabía de antemano que podía aceptarlo o rechazarlo y nadie podía influir en mi decisión. 
El Día de la Revelación, como era comúnmente conocido, me llevaron debajo de un árbol de donde crecía muérdago, una planta muy peculiar ya que adquiría propiedades mágicas si era ingerida con un trozo de chocolate. 
Estuve allí rodeado de aquellos que eran mayores de diez años. Algunos de ellos eran mis amigos. Amigos que tenía desde la infancia. Al principio, nuestro grupo había sido muy grande, pero se había reducido en los últimos meses por motivos misteriosos que entendí más tarde. Todavía recuerdo aquellos días en los que utilizábamos nuestra magia para convertir los copos de nieve en bolitas de luz, o cuando hacíamos surgir de nuestras manos pequeñas llamas de fuego que no quemaba. 
Pero todo cambió cuando, el día de mi cumpleaños, me revelaron que yo no pertenecía a ese pueblo. Que yo no había nacido allí, que mis orejas puntiagudas y mi magia no eran de nacimiento. Me habían secuestrado del mundo de los humanos al nacer y me habían llevado allí convirtiéndome en uno de ellos. 
No supe qué decir por unos instantes. Toda mi fantasía, mi infancia y mi ilusión se habían venido abajo con unas pocas palabras. La gente del pueblo eran humanos secuestrados. 
Entonces, llegó la gran pregunta del anciano del pueblo: «Tras saber tus verdaderos orígenes, ¿deseas continuar con nosotros o prefieres volver de donde viniste renunciando, así, a todos tus recuerdos y tu magia?». 
No sé si lo comprenderéis, pero preferí abandonarlo todo. Preferí dejar mi falsa vida y regresar para averiguar de dónde venía realmente. Todo lo que conocía del mundo de los humanos eran meras leyendas. Nunca pensé que fuera realidad. Así que mi respuesta fue clara: «Renuncio». Se oyeron murmullos entre el público y la mujer a la que yo había tomado como mi madre durante toda la vida se arrodilló en el suelo sollozando como nunca antes la había visto. Pero no se movió del sitio. No podía intervenir en mi decisión ni detenerme. Simplemente lloró diciendo que me quería. 
El sabio se acercó a mí con una hoja de muérdago y un trozo de chocolate y me indicó que me los metiera en la boca. Hice lo que me mandó y dijo: «Al igual que estos 
alimentos te dieron la magia, también te la quitarán y regresarás allá donde crees pertenecer». Tragué el muérdago y el chocolate y sentí dolor, como si mi cuerpo cambiase. 
Lo siguiente que recuerdo es despertar en casa de mi actual familia, donde llevo una vida normal, donde afirman que siempre he vivido con ellos. 
Después de veinte años, he decidido contarlo. No sabía con seguridad si era cierto, pero lo confirmé el día en que mi mujer dio a luz. 
Ignoro por qué conservo los recuerdos de aquello. Tal vez sea porque una parte de mí anhela la magia. Pero estos son mis orígenes. 
Ahora podéis creerme o pensar que estoy loco. Pero os juro que es verdad. 

Tal vez me creáis cuando vuestro hijo desaparezca sin dejar rastro, tal como me ocurrió a mí. >>

¿Qué os ha parecido? Dejad vuestros comentarios más abajo!!!!
Hasta la próxima lecturetas!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Todos los comentarios son bien recibidos mientras sean respetuosos ^^